Pregúntele a Lumin: ¿Qué causa el acné?

Si lidias con el acné, probablemente sepas lo frustrante que pueden ser los brotes. Si estás manejando erupciones regulares, el cuidado de la piel combinado con la gestión del estrés y una buena nutrición pueden ayudar a mantener los granos a raya. Además, es importante tener en cuenta que tu piel, como el órgano más grande de tu cuerpo, puede decirte mucho sobre tu salud.

Si bien los poros obstruidos y las rutinas de cuidado de la piel problemáticas son dos causas principales de los brotes, varios factores de salud también pueden contribuir al acné crónico. Manejar el acné puede volverse mucho más fácil cuando tienes una mejor comprensión de cuáles pueden ser las causas raíz de tus brotes. Y recuerda, el objetivo para obtener una piel más saludable es el progreso y no la perfección. Veamos algunos factores que causan acné y cómo puedes empezar a tener una piel más clara.

Alimentos Procesados y Azúcar Refinada

Una dieta alta en carbohidratos procesados y azúcar refinada puede contribuir al acné, según investigaciones. Además, los estudios muestran un vínculo entre el consumo de lácteos y el acné en algunas personas.

Los alimentos blancos refinados, como la harina blanca, el azúcar y otros carbohidratos altamente procesados, pueden exacerbar los brotes. Los alimentos de alto índice glucémico, como pasteles, galletas, papas fritas y pan y pasta blancos, pueden contribuir al acné cuando se consumen en exceso. Mejorar tu dieta con alimentos integrales, como granos enteros, proteínas saludables, vegetales de hoja verde, verduras y frutas frescas puede ayudar a tu piel y a tu salud en general.

Cambios Hormonales y Desequilibrios

Demasiado aceite causa granos y brotes, y los cambios hormonales pueden estimular la producción excesiva de aceite. Si pensaste que los desequilibrios hormonales serían cosa del pasado una vez que salieras de la adolescencia, piénsalo de nuevo. El acné adulto puede significar brotes bien entrados tus 20, 30 y 40 años. Las fluctuaciones de hormonas masculinas y femeninas contribuyen al acné debido a las interrupciones que causan en el cuerpo y en la superficie de tu piel.

Afortunadamente, hay muchas opciones de tratamiento para ayudarte a manejar el acné. Las rutinas de cuidado de la piel que equilibran el aceite y el pH, las técnicas de gestión del estrés (piensa en meditación y respiración profunda), y abordar tu salud intestinal con probióticos y nutrición pueden hacer una diferencia positiva en la salud de tu piel. También puedes consultar con tu dermatólogo para ver si los tratamientos recetados pueden ayudar.

Factores Genéticos — Tus Padres

Las investigaciones muestran que algunos factores hereditarios pueden aumentar tu riesgo de acné. Si tienes un padre con acné, o si ambos padres manejaron la condición en algún momento, puedes tener un mayor riesgo de brotes crónicos.

Si bien no existe tal cosa como un gen del acné per se, las condiciones hormonales y los tipos de piel pueden ser hereditarios. Esto no significa que tendrás acné si tus padres lo tuvieron, pero las medidas preventivas pueden ayudar a detener el acné.

Productos para el Cuidado de la Piel que Obstruyen los Poros

Manejar y prevenir el acné requiere un enfoque de dos frentes: cuidar tu cuerpo con ejercicio y nutrición mientras incorporas una rutina de cuidado de la piel efectiva puede ayudarte a lograr la mejor piel posible.

Los productos de cuidado de la piel de baja calidad pueden dejar tus poros obstruidos y tu piel inflamada e irritada. Para prevenir y curar los brotes, busca productos etiquetados como:

• Libre de aceite
• No comedogénico
• No acnegénico

Desarrollamos Lumin para eliminar las conjeturas del cuidado de la piel de los hombres. No solo nuestros productos promueven una piel clara al equilibrar la producción de aceite, despejar los poros obstruidos y mantener el pH saludable de tu piel, sino que también abordan la estructura única de la piel de los hombres.

Deshacerse del acné puede parecer una hazaña difícil, pero te animamos a recordar que toda piel es buena piel. Nadie es perfecto, y puedes estar orgulloso de tu piel sin importar dónde te encuentres en tu viaje de cuidado de la piel.